Tus ojos son el espejo de tu alma. Te
permiten ver el exterior y, gracias a ellos, puedes expresar todas las
emociones y todos los sentimientos que vives interiormente. Según su
profundidad, es posible descubrir tus relaciones con el mundo exterior.
El funcionamiento de tus ojos refleja
el modo en que ves la vida y tu relación con ésta. Cada ojo representa un
aspecto particular de tu ser. El ojo izquierdo representa el aspecto interior,
emocional e intuitivo. Te sirve de vigía, permitiéndote quedar al acecho
frente a todo lo que puede constituir un peligro y así reaccionar prontamente.
El ojo derecho, él, trata racionalmente el universo y las situaciones exteriores.
Es el ojo del reconocimiento que te permite moldear tu identidad.
Problemas en los ojos son la indicación de que existen cosas que rehúsas
ver y que vuelven a plantear frecuentemente tus principios fundamentales y tus
nociones de justicia. Girando adentro tuyo tu mirada antes de fijarla hacía el
mundo, encontrarás una nueva visión de conjunto y una mirada nueva sobre el
camino de tu existencia. Tu mirada es auténtica y sin enjuiciamiento.
Dolencias en los ojos, entre otras la
ceguera, son un modo de cerrarte a lo que ves.
Eliges ignorar lo que sucede
alrededor tuyo, renunciando a las impresiones visuales que te vuelven a poner
en tela de juicio. En vez de aceptar una realidad que podría ser dolorosa,
repugnante o confusa, prefieres "cerrar los ojos".
La ceguera puede estar causada por la
diabetes o también por la acumulación de cosas que rehúsas aceptar, aportándote
confusión y un sentimiento de ya no saber a donde ir. Frecuentemente herida por
un impacto, por un traumatismo o por un gran miedo interior, tu vista se retira
y la energía de los órganos visuales también. En particular puede tratarse del
temor de perder a alguien o algo que quieres. Sin embargo, la oscuridad
exterior parece generalmente aportar una apertura interior, un universo
privado, secreto y coloreado. Entonces te abro más a tu mente interior.
Una deformación del ojo
(astigmatismo, miopía, presbicia) indica que buscas de modo desmesurado
encontrar respuestas en tu exterior en vez de dentro tuyo. Cuanto más busco
afuera de ti, más te apartas de tu núcleo interior (de tu ser superior).
Una visión velada (cataratas,
glaucoma) indica que tu versión de la realidad es contraria a la que ves. Esto
te indica que pones difícilmente tu atención sobre lo esencial, y rechazas lo
que ves.
En tus manos está tomar consciencia
de la belleza que te rodea y tomarte el tiempo para mirar.