jueves, 1 de mayo de 2014

el espejo de la emociones: los ojos


Tus ojos son el espejo de tu alma. Te permiten ver el exterior y, gracias a ellos, puedes expresar todas las emociones y todos los sentimientos que vives interiormente. Según su profundidad, es posible descubrir tus relaciones con el mundo exterior.

El funcionamiento de tus ojos refleja el modo en que ves la vida y tu relación con ésta. Cada ojo representa un aspecto particular de tu ser. El ojo izquierdo representa el aspecto interior, emocional e intuitivo. Te sirve de vigía, permitiéndote quedar al acecho frente a todo lo que puede constituir un peligro y así reaccionar prontamente. El ojo derecho, él, trata racionalmente el universo y las situaciones exteriores. Es el ojo del reconocimiento que te permite moldear tu identidad.
Problemas en los ojos son la indicación de que existen cosas que rehúsas ver y que vuelven a plantear frecuentemente tus principios fundamentales y tus nociones de justicia. Girando adentro tuyo tu mirada antes de fijarla hacía el mundo, encontrarás una nueva visión de conjunto y una mirada nueva sobre el camino de tu existencia. Tu mirada es auténtica y sin enjuiciamiento.
Dolencias en los ojos, entre otras la ceguera, son un modo de cerrarte a lo que ves.
Eliges ignorar lo que sucede alrededor tuyo, renunciando a las impresiones visuales que te vuelven a poner en tela de juicio. En vez de aceptar una realidad que podría ser dolorosa, repugnante o confusa, prefieres "cerrar los ojos".
La ceguera puede estar causada por la diabetes o también por la acumulación de cosas que rehúsas aceptar, aportándote confusión y un sentimiento de ya no saber a donde ir. Frecuentemente herida por un impacto, por un traumatismo o por un gran miedo interior, tu vista se retira y la energía de los órganos visuales también. En particular puede tratarse del temor de perder a alguien o algo que quieres. Sin embargo, la oscuridad exterior parece generalmente aportar una apertura interior, un universo privado, secreto y coloreado. Entonces te abro más a tu mente interior.
Una deformación del ojo (astigmatismo, miopía, presbicia) indica que buscas de modo desmesurado encontrar respuestas en tu exterior en vez de dentro tuyo. Cuanto más busco afuera de ti, más te apartas de tu núcleo interior (de tu ser superior).
Una visión velada (cataratas, glaucoma) indica que tu versión de la realidad es contraria a la que ves. Esto te indica que pones difícilmente tu atención sobre lo esencial, y rechazas lo que ves.

En tus manos está tomar consciencia de la belleza que te rodea y tomarte el tiempo para mirar.

lunes, 10 de marzo de 2014

Nuestro higado

El hígado, órgano de Dosha Pitta, tiene funciones muy diferentes y está relacionado con todas las partes del cuerpo. Trabaja todo el día!, crea, procesa, provee de nutrientes a todas las células. Su actividad es tan completa y compleja que necesita estar libre de obstáculos para la distribución de esos nutrientes y hormonas.

Los cálculos en el hígado son el origen de prácticamente cualquier tipo de enfermedad. Muchas de las enfermedades crónicas, tienen relación directa con la cantidad de cálculos biliares en el hígado. Son el principal motivo de no poder mantener o recuperar una buena salud, vitalidad y energía.

Las obstrucciones en nuestro cuerpo van produciendo una serie de complicaciones que se extienden de unos tejidos a otros, por ejemplo, obstrucciones en los vasos sanguíneos, en el colon -el estreñimiento constante impide la eliminación natural de toxinas, en forma de heces, de nuestro organismo, lo que no solo provoca un entorno tóxico del colon sino, posteriormente si no se resuelve, de todo el organismo-.

La bilis producida por el hígado tiene múltiples funciones que influyen en la salud de cada órgano y sistema del cuerpo. Ayuda a digerir las grasas, las proteínas de origen animal, el calcio, eliminar toxinas del hígado, a mantener los niveles de grasa en sangre, a mantener el equilibrio ácido-alcalino del tracto intestinal, a evitar que se desarrollen microbios malos en el colon. La mayor parte de los alimentos no pueden ser digeridos si no hay suficiente bilis. El hígado tiene que producir diariamente la cantidad necesaria de bilis para mantener un sistema digestivo sano y fuerte de lo contrario habrá problemas digestivos, de eliminación de desechos, o sobreesfuerzo del organismo para desintoxicar la sangre. Los hígados de muchas personas producen mucho menos de la cantidad de bilis diaria necesaria, ello tiene relación estrecha o indirecta, pero relación al fin, entre problemas leves o graves de salud y escasa producción biliar, o cantidades considerables de cálculos biliares. Algunos de estos cálculos pueden originarse en la vesícula. Una limpieza de ambos es una forma sencilla de restablecer la salud, de ir disminuyendo los síntomas de malestar, de ir acabando con las enfermedades.

Los resultados de una limpieza hepática y de vesícula, son realmente beneficiosos tanto como efectivos porque este órgano tiene un control directo sobre el desarrollo y el funcionamiento de cada célula del cuerpo. Pueden disminuir o hasta desaparecer trastornos del sistema digestivo, dolores de espalda, cualquier tipo de alergias, flexibilizar el cuerpo, detener el envejecimiento, tener una piel más tersa y nutrida, unos ojos más sanos y brillantes, una boca más sana favorecer el equilibrio emocional, obtener mayor claridad mental, nivel de concentración y ¡más creatividad!, olvidarse de la fatiga por el incremento de vitalidad y energía.

Volver a tener un hígado limpio es contar con la oportunidad de vivir con salud, llenos de vitalidad.


viernes, 3 de enero de 2014

MAPA DE LAS MEMORIAS CORPORALES.


Nuestro cuerpo refleja nuestra genealogía y sus relaciones.
No debemos caer en la trampa de buscar recetas infalibles porque no las hay, este artículo sólo pretende dar unas pocas orientaciones que sirvan como base.

Queremos decir que asignar un ancestro a cada órgano o área corporal, es parecido a la tarea en la que se han enfrascado y se siguen enfrascando muchos neurólogos localistas: la de asignar funciones cognitivas concretas a zonas cerebrales concretas.

La conclusión a la que llegan es que hay especialización hasta cierto punto, porque en el cerebro, igual que en el Universo, primero todo interacciona con todo y segundo, descubren que se trata de un holograma, de manera que todo está contenido en cada parte del todo.

Antes de seguir, tenemos que tener en cuenta que en cada zona corporal conviven tres informaciones:
1.-La memoria de nuestro árbol genealógico
2.-La memoria biográfica personal
3.-Los mensajes que el sabio interior nos envía a través del cuerpo

1.- La memoria de nuestro árbol genealógico:
La familia está viva en la piel, en el cuerpo, está hablando. Hasta tal punto que podemos reconocer a nuestro árbol por la huella que este ha dejado en nosotros… Esa “cierta especialización” de la que hablábamos, en la que los estratos de nuestro árbol genealógico vive en cada uno de nosotros se podría expresar así, muy a grandes rasgos:

PATERNO: Parte derecha del cuerpo
MATERNO: Parte izquierda
BISABUELOS: Hombros, cabeza
ABUELOS: Tórax y brazos
PADRES: Desde la cintura a las rodillas
HERMANOS: Desde rodillas a plantas de los pies

2.-La memoria biográfica personal:
Desde la manera en la que somos concebidos, hasta el efecto que nos ha causado la regaña del jefe, pasando por el tipo de parto, como nos han acariciado de niños, todo queda escrito en el cuerpo. Por ejemplo, consideramos que el peso de la culpa se asienta en la parte alta de la espalda y los traumas infantiles en los pies. La piel es un gran lienzo en la que queda escrita la historia de nuestras relaciones con el mundo.

3.- Los mensajes que el sabio interior nos envía a través del cuerpo:
Nuestro cuerpo es el mapa físico de nuestra conciencia, un fiel reflejo de cómo funcionamos en las distintas áreas de la vida. Cualquier síntoma físico es una oportunidad para hacernos conscientes de que hay un área en nuestra vida que necesita atención.

INCLINACIÓN:
El cuerpo en su totalidad se inclina al andar: hacia atrás o hacia delante:

A) Estaremos huyendo del pasado si caminamos inclinándonos ligeramente hacia delante.
Si nos inclinamos hacia atrás al andar tenemos miedo a entrar en la vida.

La cabeza también puede simbolizar al padre y a todos los ancestros varones. Caminar con la cabeza por delante es igual a no reconocer nuestros deseos, andamos refugiados en el intelecto.

Los tumores cerebrales tienen que ver con los secretos escondidos del árbol.

Las migrañas con las retenciones sexuales.

Los ojos como conjunto son de carácter masculino.
El ojo derecho es el intelectual, el racional.
El izquierdo es el del corazón, el ojo profundo, el de la receptividad.

La boca y las orejas simbolizan el linaje materno (son receptivas).

La sordera en el oído izquierdo puede ser algo que no quiero escuchar del linaje femenino.

Los dientes picados son el resultado de la rabia no expresada.

La garganta es el canal de expresión y de creatividad.
Tras una amigdalitis se esconde el miedo, las emociones reprimidas y la creatividad sofocada.

El pecho: aquí está la relación corazón-emociones
Si no nos han amado desarrollaremos un pecho endurecido e insensible

Las manos son el símbolo de la elección:
La mano derecha es el símbolo de la elección racional, sin fe.
La izquierda es la intuitiva.

Las uñas son nuestras defensas simbólicas…¿Heredamos uñas de mucho grosor?

La espalda: los problemas simbolizan que cargas a los padres.
Si no nos acariciaron de pequeños podemos sufrir una desviación de columna

En la espalda se van archivando los conflictos no resueltos de nuestro pasado:
-En la parte lumbar está la conexión con nuestra sexualidad y creatividad (los padres).
-En la parte dorsal es la conexión con nuestra parte emocional (los abuelos en el árbol).
-En la parte cervical nos conectamos con nuestro intelecto (los bisabuelos)

El vientre: la madre y todo lo que “digerimos de la vida”.
Los problemas de estómago están asociados al miedo, a la angustia y la ansiedad.

La pelvis se conecta con la sexualidad y con nuestros padres
El miedo a la sexualidad puede traducirse en una pelvis movida hacia atrás.

Las rodillas nos muestran nuestra flexibilidad, nuestra adolescencia.
Si vivimos encerrados en nuestro castillo, inflexibles, sufriremos con las rodillas.

Los pies simbolizan el territorio, conectados con nuestra hermandad.
Cuando no estamos viviendo nuestra vida, caminamos como un ladrón sin hacer ruido.

Si somos hijos de padres divorciados, o separados…las puntas de los pies se separan.
Vivimos una época buena en a la infancia…las puntas de los pies miran hacia dentro.

Cuando los pies se inclinan hacia fuera nos señalan que no tenemos un lugar en el mundo.

Somos un espíritu que utiliza un cuerpo de vehículo para pasearnos por esta vida, pero él no es una carrocería inerte, cada célula contiene lo que fueron nuestros ancestros y lo que somos nosotros.

Y no olvidemos lo que dice el proverbio chino:

“Nada sienta mejor al cuerpo que el crecimiento del espíritu”